Valéria Ravani

Nuestra Mujer Positiva es Valéria Ravani, Bióloga Genetista, con una carrera en la Industria Farmacéutica que la llevó a convertirse en ejecutiva internacional y navegante, con varios títulos nacionales y algunos logros memorables, como la Regata Eldorado Brasilis a Trindade, un viaje a la Antártida con la familia Beli y, recientemente, una travesía por el Atlántico con su propio velero.


¿Cómo comenzó su carrera?

Desde pequeña, he buscado combinar los temas que me apasionan (Salud - Genética Humana) con un trabajo que me brindara independencia financiera.


¿Cómo está estructurado el modelo de negocio de BioMarin Farmacéutica y la Asociación Alianza Genoma?

BioMarin fue la empresa donde trabajé formalmente durante los últimos 15 años. La compañía se enfoca en el tratamiento de enfermedades genéticas raras, por lo que mi labor como Ejecutiva de Marketing iba más allá de hablar sobre nuestros productos; consistía en ayudar a diferentes personas a identificar mejor estas enfermedades. Impartimos muchas clases y participamos en numerosos congresos en Brasil, América Latina y el mundo. Trabajar con enfermedades raras implica conectar a todas las personas involucradas en el proceso, desde la identificación de la enfermedad, las prescripciones y la demanda, hasta los tratamientos complementarios. Como decimos, “¡muchos stakeholders!”

La idea de esta ONG (Alianza Genoma) surge de mi formación en Genética Humana y de haber observado que una parte crucial en el tratamiento de enfermedades genéticas, muchas de ellas raras, es el diagnóstico. Existen estudios científicos que demuestran que las familias pueden pasar años sin que alguien les diga que existe una fuerte sospecha de que el problema de su(s) hijo(s) tenga un origen genético. Crear una ONG que establezca un fondo permanente para colaborar con universidades e instituciones altamente especializadas que puedan realizar exámenes para familias de bajos recursos será una tarea difícil, pero muy gratificante.

Voy a dejar atrás el modelo de una empresa de investigación y fabricación de medicamentos, que colaboraba con laboratorios para la realización de diagnósticos, para dedicarme a una ONG que contribuirá con una de las etapas más difíciles para las familias que enfrentan este problema. Aunque no haya un medicamento específico, el solo hecho de obtener un diagnóstico ya representa un alivio y puede cambiar la manera en que se maneja la enfermedad.


¿Cuál ha sido el momento más difícil de su carrera?

Creo que es este momento. Dejar atrás mi vida como ejecutiva internacional y embarcarme en una nueva etapa que aún no está dando frutos y que conlleva muchas incertidumbres es un gran desafío. He vuelto a estudiar, estoy construyendo una nueva red de contactos y, por supuesto, reinventando mi papel en este mercado, administrando mis inversiones de manera más restringida.


¿Cómo logra equilibrar su vida personal con su vida corporativa/emprendedora?

Mi equilibrio está en el deporte que practico. Comencé a navegar hace más de 20 años y, gracias a mis amigos de la escuela de vela donde aprendí (BL3), inicié un proyecto para formar un equipo femenino de vela oceánica y competir con mi velero, que en ese momento tenía 32 pies. Este se convirtió en otro desafío, ya que rápidamente me di cuenta de que había muy poco espacio para las mujeres en la vela oceánica. Desde entonces, mi velero ha ido creciendo y hemos ganado varios títulos. También he competido en otros veleros. Hoy en día tengo más de 20 títulos y alrededor de 100 medallas en diversos campeonatos en Brasil.

¿Cómo equilibro los desafíos de la vida profesional con la vida personal? Con otro desafío: ¡la vela oceánica!


¿Cuál es su mayor sueño?

Mi mayor desafío en este momento es lograr el éxito con la Alianza Genoma, ayudando a muchas familias de bajos recursos a obtener un diagnóstico. Sin embargo, confieso que también he comenzado a pensar en un Doctorado Profesional en Economía de la Salud.


¿Cuál es su mayor logro?

Logré este sueño hace dos años, cuando compré mi actual velero, el Bossa Nova, en Portugal y crucé el Atlántico con otras dos personas a bordo. Fue un momento de gran comunión con la naturaleza, un detox total de Internet y teléfono, que me permitió reflexionar profundamente sobre lo que quería hacer a partir de entonces. ¡Una experiencia maravillosa!


Libro, película y mujer que admira (que no sea su madre).

  • Libro: Over the Edge of the World – La primera circunnavegación del mundo por Fernando de Magallanes (Laurence Bergreen).
  • Película: ¿Puede ser la serie House?
  • Mujer que admira: Frida Kahlo.